Lamborghini Countach
El gran diseñador Giorgietto Giugiaro ha declarado en alguna ocasión que el Citroën DS es “el único automóvil que parece concebido en otro mundo, es imposible imitarlo”. Nosotros nos permitiríamos añadir otro modelo a esa lista de “interplanetarios”, y es el Lamborghini Countach. Fue diseñado por Marcello Gandini, y es increíble que un coche de hace cuarenta años siga resultando absolutamente moderno. En 1971 se presentó el prototipo Countach LP 500, que cuando llegó a la producción en serie en 1973 pasaría a llamarse LP 400 (3.929 cc, 375 CV). Desde el punto de vista técnico el LP400 era bastante convencional, con un bastidor tubular y con el mismo motor V12 4.0 del Miura, aunque potenciado y en posición longitudinal.
Por si su diseño no era suficientemente llamativo estrenó además las puertas de apertura de tijera, antes solo vistas en el prototipo de Bertone Alfa Carabo. Quienes caían rendidos a los encantos del Countach debían hacer frente a ciertos inconvenientes, como la nula visibilidad trasera, la dureza de los pedales o la escasa altura para la cabeza. Con un propulsor muy potente y rebosante de par, en cierto modo era como un muscle car pero con motor central.
La versión más cotizada en la actualidad es la primera (1974-1978) al ser su diseño más puro y la más escasa en cuanto a unidades fabricadas, con solo 151 coches. Su sustituto fue el 400 S (1978-1982), identificable gracias a sus perfiles anchos en los pasos de rueda, las llantas Campagnolo y los neumáticos Pirelli P7. Más tarde llegó el LP 500 S –que en EE. UU. se llamó 5000 S–. Con una cilindrada aumentada a 4.754 cc seguía rindiendo 375 CV. El que ilustra esta página es el sueño de cualquier niño aficionado a los coches de los ochenta. Es además el que se expuso en el Salón de Ginebra en 1982, con seis carburadores Weber y una combinación de colores –gris con el interior azul– muy rara y atractiva. Con solo 18.000 km en el contador, fue subastado por RM en California el pasado mes de agosto y alcanzó 198.000 dólares.